Un tren compuesto por 16 vagones que se dirigía desde Matamoros hacia Monterrey sufrió un descarrilamiento a la altura del ejido El Banco, en la ciudad de Reynosa.

El descarrilamiento afectó a 12 vagones cisternas, de los cuales siete transportaban diésel y cinco contenían gasolina, con un volumen superior a los 31 mil galones cada uno.

Tres de estos vagones presentaron fugas de combustible, lo que motivó la intervención de Protección Civil y Bomberos Municipales, así como de la Guardia Estatal, Guardia Nacional y elementos del Ejército Mexicano, quienes aseguraron el área para prevenir cualquier riesgo.

No se registraron personas heridas debido al accidente, dado que ocurrió en una zona despoblada.

Las primeras investigaciones sugieren que el descarrilamiento podría haber sido causado por la inadecuada colocación de los clavos de las vías, posiblemente manipulados por personas ajenas.

El lugar del incidente permanecerá cerrado durante el tiempo necesario para el trasvase del combustible a un vehículo cisterna, un proceso que se estima podría tardar más de seis horas.

Los daños materiales en las vías férreas son considerables y se están llevando a cabo las inspecciones pertinentes para determinar la causa exacta del accidente.