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URGE EN MÉXICO UN NUEVO PACTO PARA LA GESTIÓN INTEGRAL DE RESIDUOS

Por Abel López Jiménez

Urge en México un nuevo pacto en materia de gestión integral de residuos, porque “hay una desvinculación entre municipios, estados y la federación, una ruptura en la estructura de colaboración que ha producido un divorcio en materia de infraestructura y equipamiento”, señaló Francisco Galván, presidente de DS Latinoamericana.

Luego de participar en el Congreso Internacional en Gestión de Residuos, advirtió que actualmente no existe una política pública clara a nivel nacional y, para construirla, se debe revisar y actualizar la legislación reglamentaria en la materia.

Esa acción, dijo, debe llevar a la creación de organismos operadores con una perspectiva integral sobre el manejo de residuos y una lógica intermunicipal para atender el rezago en materia de infraestructura; además de alentar la participación público-privada, pero con reglas claras del juego.

“Se habla mucho de economía circular, pero no tenemos infraestructura básica. Seguimos teniendo tiraderos a cielo abierto, sitios de disposición final no controlados. Tenemos que avanzar de forma gradual”, apuntó Galván.

Carlos Silva, presidente de International Solid Waste Association (ISWA), advirtió que la generación de residuos sigue creciendo a nivel global y plantea grandes desafíos en términos de recolección, de disposición adecuada y de su valorización.

Señaló que actualmente no existe mucho control sobre la situación y los impactos para el medio ambiente y para la salud son considerables:

“El cambio es urgente. Y el primer paso para este cambio es justamente tener la gestión de residuos bajo control, con un sistema de recolección universalizado, con una organización regional, soluciones de largo plazo, con financiamiento e infraestructura adecuados y con cierre de basureros a cielo abierto”, indicó.

El mensaje para países como México, Brasil, Sudáfrica, China, India, que están creciendo económicamente y con gran población, remarcó Silva, es justamente que tienen que empezar desde ahora este cambio, pues urge que el tema tenga prioridad en la agenda de los gobiernos, de las empresas y de los ciudadanos.

Diana Salas Ohm, ingeniera ambiental de la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM), afirmó que cada mexicano genera cerca de 1.2 kilogramos de residuos por día, lo que al multiplicarse por los cerca de 129 millones de personas que residen en el territorio nacional, se convierte en 150 mil toneladas de basura cada 24 horas. De esa cantidad, entre 12% y 15% son de plásticos:

“Los residuos de plástico son desechos que no se quedan en el lugar donde se produjeron, pueden viajar por el mundo esperando durante varios años hasta el momento de su desintegración. Los plásticos no sólo generan altos niveles de gases contaminantes durante su fabricación, también contaminan y afectan gravemente los ecosistemas naturales y urbanos mientras esperan por decenas de años su degradación”, aseguró Salas Ohm.

ONU URGE A REDUCIR GENERACIÓN DE DERECHOS

El volumen de residuos en el mundo, que en 2023 era de 2 mil 300 millones de toneladas, podría aumentar más de 60 por ciento en 2050, si no se toman medidas urgentes, y tener graves impactos sanitarios y económicos, advirtió ayer la Organización de Naciones Unidas (ONU).

A través del informe Transformando residuos en recursos, elaborado por el Programa de Naciones Unidas para el Medio Ambiente (Pnuma), el organismo internacional reconoce que, a pesar de los esfuerzos en la materia, poco ha cambiado la realidad.

A este ritmo, advierte, se espera que los desechos corrientes (excluyendo los industriales y de la construcción) alcancen 3 mil 800 millones de toneladas a mediados de este siglo, superando las previsiones de un informe anterior del Banco Mundial sobre la cuestión.

Abunda que la crisis será especialmente aguda en los países que utilizan métodos contaminantes para tratar los residuos, como vertederos o incineración al aire libre, que tienen como consecuencia la contaminación del suelo y la emisión de gases de efecto invernadero, como el metano, o gases contaminantes, como el carbono negro.

“Incluso, la humanidad ha retrocedido, generando más desechos. Millones de personas no disponen de un sistema de recolección de residuos. Los países ricos recogen lo esencial, pero en los de bajos ingresos la recolección es inferior a 40 por ciento. El gran problema son los contaminantes que se liberan hacia la atmósfera y que impactan en el cambio climático”, se indica el citado informe.