El Gobierno del Perú confirmó la muerte de un ciudadano peruano entre los seis migrantes que fueron asesinados por integrantes del Ejército mexicano, el pasado 1 de octubre en Chiapas.

Los hechos ocurrieron cuando los militares dispararon contra dos camionetas que transportaban a 33 migrantes de diversas nacionalidades.

Perú condena el ataque

La Cancillería de Perú condenó “enérgicamente” el ataque, calificándolo de “execrable”.

A través de su embajada en México, el Gobierno peruano exigirá a las autoridades mexicanas una investigación urgente que esclarezca las circunstancias y determine las responsabilidades del uso de la fuerza por parte de los militares.

Asimismo, se brindará asistencia humanitaria a los familiares de la víctima peruana en este momento difícil.

Sedena confirma el ataque

Por su parte, la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) no ha emitido mayor información después de haber confirmado la separación de sus funciones a dos elementos del Ejercito involucrados.

De acuerdo con el comunicado oficial de la Sedena, el tiroteo tuvo lugar en Villa Comaltitlán–Huixtla en Chiapas durante una operación de patrullaje, en la que los militares escucharon detonaciones y, en respuesta, dispararon contra un grupo de migrantes que viajaban en dos camionetas.

De los 33 migrantes presentes, cuatro murieron en el lugar, y otros dos fallecieron posteriormente en un hospital y 10 más sufrieron heridas graves.

La Sedena había reportado que las víctimas eran de diversas nacionalidades, incluyendo egipcios, nepalíes, cubanos, indios y pakistaníes.

Tensión diplomática

Este incidente también puso de relieve las tensiones diplomáticas entre Perú y México, que se han intensificado en los últimos años debido a diferencias políticas y declaraciones controversiales entre los líderes de ambos países.

Cabe recordar que en diciembre de 2022, la presidenta peruana, Dina Boluarte, expulsó al embajador mexicano en Lima tras acusar a Andrés Manuel López Obrador de referirse a ella como “presidenta espuria”.

Posteriormente, en febrero de 2023, Perú retiró a su embajador en México como respuesta a las tensiones.

Estos conflictos han afectado la cooperación en temas regionales, incluida la migración y la seguridad.