SACRIFICAR UN GRINGO: VIOLENCIA Y XENOFOBIA EMPAÑAN PROTESTA ANTIGENTRIFICACIÓN EN CDMX
Por Luis Martínez Alcántara
En la marcha contra la gentrificación en la Ciudad de México, del 4 de julio, surgió la leyenda viral “sacrifica un gringo”, acompañada de consignas como “¡Gringo, go home!” y “Esta no es tu casa”, dirigidas a extranjeros y migrantes en colonias como Roma, Condesa, Juárez e Hipódromo.
Loable como protesta, el movimiento derivó en vandalismo: rompieron ventanas y mobiliario de restaurantes, empujaron a comensales al suelo y usaron mobiliario urbano para causar daños.
Viendo esto, vecinos y la comunidad en redes subrayaron: criticar la gentrificación no debe volverse violencia xenofóbica. Hoy prevalece un doloroso dilema: la causa social es válida, pero la agresión contra personas —especialmente migrantes— está fuera de lugar.
El gobierno capitalino, por voz de Clara Brugada, condenó las expresiones de odio y el vandalismo durante la marcha. En un comunicado resaltó que las protestas pueden denunciar la gentrificación, pero no justificar la violencia contra seres humanos.
Además, rechazó cualquier mensaje xenófobo hacia migrantes, subrayando que el desalojo poblacional no es excusa para incitar al odio.
Colectivos y vecinos impulsan marchas pacíficas con consignas como “La gentrificación no es progreso, es despojo” y “Comercio local, nuestra capital”. Sin embargo, fue un pequeño sector encapuchado y violento el que tomó protagonismo con agresiones a establecimientos y personas.
La marcha contra la gentrificación expresó una demanda legítima por vivienda digna y arraigo vecinal, pero fue mancillada por la violencia y los discursos de odio.
La CDMX rechaza esas actitudes y llama a rechazar la xenofobia como arma de protesta. Es esencial separar la indignación frente al despojo urbano de la agresión hacia personas inocentes. Solo a través de movilizaciones pacíficas, políticas de vivienda incluyentes y respeto a los derechos humanos, se podrá avanzar. Promover el odio en nombre de una lucha social solo la deslegitima y provoca más división.